No sólo la danza folclórica o el ballet pueden ser actividades formativas para niños y jóvenes, la danza contemporánea también se ha convertido en una opción gracias a su expresión más libre y auténtica con el cuerpo.

Es bajo esta premisa que la bailarina y docente Griselda Salazar Absalón desarrolla el proyecto coreográfico infantilBiguidibela (Mariposa desnuda) apoyado por el Programa de Estímulos a la Creación y el Desarrollo Artístico  (PECDA) del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) en Jalisco.

Se trata de una pieza inspirada en una leyenda prehispánica oaxaqueña en la que niños y adolescentes de entre 7 y 15 años de edad con formación en danza contemporánea son los protagonistas.

“Tengo nueve años trabajando con niños y me encanta, porque son como un libro en blanco, lo que se les enseña lo absorben y es satisfactorio ver su evolución física y mentalmente. Se vuelven más maduros, críticos y más seguros de sí”, comentó Griselda Salazar.

A lo largo del montaje se cuenta la historia del murciélago, considerada el ave más bella de la creación llamadabiguidibela, que un día no pudo soportar el clima frío y subió al cielo para pedirle al creador plumas que la cobijaran del mal tiempo.

El creador escuchó su petición y apenado le dijo que ya no tenía plumas, pero no todo estaba perdido, pues podía bajar a la tierra y pedir una pluma a cada ave que encontrara en el camino.

Así, poco a poco obtuvo bellos plumajes con el apoyo de otras aves y al convertirse en el centro de atención de la naturaleza, se volvió altivo y arrogante cada vez que emprendía el vuelo.

Al transformarse en un ser despectivo, hiriente, agresivo e irrespetuoso con el resto de los animales de la tierra, biguidibela recibió un castigo, convirtiéndose en murciélago y retirándose  a vivir en las cuevas. También olvidó el sentido de la vista para no acordarse de los colores que alguna vez tuvo y perdió con su mala actitud.

“Es una leyenda que nos habla de los valores, el respeto y la importancia de no ser egoístas o presumidos, además de las consecuencias a las que nos puede llevar la vanidad. Da muchos elementos para trabajar con el tema de las aves y su movimiento, lo que la convierte en una historia muy rica a nivel coreográfico”.

La integrante de la compañía Corpo Danza reconoce que hasta el momento ha sido fácil guiar a los participantes, pues han sido sus alumnos desde hace cinco años en el área infantil del centro formativo Corpo Espacio Danza.

La bailarina destacó que el proceso ha sido muy divertido, porque conocen muy bien el lenguaje que se maneja y es fácil guiarlos, ya que también proponen y dan ideas, lo cual ha permitido que haya mucha conexión y buena comunicación.

“El centro formativo se ha convertido en el único espacio en ofrecer clases de danza contemporánea para niños. Aquí en Jalisco hay mucho ballet y el nivel es muy bueno, pero lo que más disfrutan de las clases es la libertad que se les da para moverse y ser ellos mismos, a diferencia del ballet que es más rígido”.

Griselda Salazar espera que la obra de Biguidibela (Mariposa desnuda) esté lista en noviembre con el fin de dar funciones en municipios, escuelas, parques y lugares donde no llegan los espectáculos de danza a cargo de niños y jóvenes.

“La gente tiene la idea que primero se debe estudiar ballet antes que la danza contemporánea, además de no ser tan conocido que a un niño le puedas dar esta técnica. Con este proyecto queremos mostrar que no es así y desde la infancia se puede tener un buen nivel en danza contemporánea”.

La egresada de la licenciatura en danza contemporánea por la Universidad Veracruzana agregó que ser beneficiaria del PECDA representa un estímulo para llevar a cabo una propuesta y tener los medios para crear y mostrar el resultado del trabajo artístico.

Información: CGP

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