En un territorio dominado por la injusticia, la explotación y la desigualdad social, creció y se forjó un hombre que desde joven luchó contra el régimen zarista ruso: León Trotsky.

El ejército rojo, comandado por Trotsky, peleó por los derechos de obreros y campesinos; en este camino al cambio, no solo ganó aliados, también poderosos enemigos.

Por más de 60 años traición, batallas, crimen y venganza persiguieron a este revolucionario, obligándolo a dejar Rusia en 1929. Finalmente fue asesinado en la Ciudad de México en 1940.