En su informe del 1o. de septiembre de 1917, el presidente Venustiano Carranza anunció un programa de aumento de impuestos al timbre, el tabaco, los licores y el petróleo, con la finalidad de aumentar los recursos obtenidos por el cobro de impuestos y tratar de equilibrar la balanza de ingresos y egresos. Dichas medidas dieron resultado a corto plazo.

Al acercarse la fecha de su segundo informe presidencial, las secretarías se abocaron a entregar los datos que integrarían su informe. A mediados de julio de 1918, la Secretaría de Hacienda informó que el gobierno había recaudado en impuestos 98 millones 789 mil 279.53 pesos en oro, cantidad equivalente a lo registrado en el año fiscal de 1910. Desafortunadamente, se mantuvieron las exigencias en el gasto militar, lo que impidió que esos recursos se pudieran invertir en obra pública y gasto social. En el periodo comprendido entre septiembre de 1917 y el 31 de mayo de 1918 se tuvieron de egresos superiores a los 137 millones pesos oro.