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RESEÑA SOLANGE LEBOURGES 50 AÑOS DE VIVENCIAS PERSONALES Y REFLEXIONES SOBRE LA DANZA

  • Artes escénicas
Información: ATR
Comunicado No. 1166/2008
24 de septiembre de 2008

***Presentó en Bellas Artes su libro autobiográfico Lo bailado nadie me lo quita


Solange Lebourges presento su libro Lo bailado nadie me lo quita. Memorias de una bailarina. Foto: F. S./Conaculta“La danza es una segunda piel, una profesión más ligada al hacer que al ser y más que un oficio es un modo de ser”, afirmó Solange Lebourges al presentar su libro Lo bailado nadie me lo quita. Memorias de una bailarina.


La prestigiada bailarina encabezó la ceremonia de presentación en la Sala Adamo Boari del Palacio de Bellas Artes con la compañía del coreógrafo Marco Antonio Silva, el editor Eduardo Casar y el periodista Gustavo Emilio Rosales. Francesa de origen con tres décadas de arraigo en México, la artista reveló haberse sentido a gusto y muy libre al escribir su texto autobiográfico en español, porque seguramente en francés lo habrían dificultado su formación escolar y los tabús.


“Escribir Lo bailado nadie me lo quita en español me dio mayor libertad”, insistió Solange, tras revelar que el texto es resultado de 50 años de investigaciones, experiencias profesionales, vivencias personales y reflexiones.


Con el texto quiso rendir homenaje a un oficio que siempre fue la pasión de su vida desde que tuvo uso de razón, movida por un impulso amoroso orientado a hablar de él y defenderlo porque siempre “ha sido mal conocido y sujeto a muchos prejuicios”.


Durante su alocución, breve y emotiva, Solange Lebourges brindó un especial reconocimiento público al coreógrafo Descombey, del que fue intérprete en el Ballet Teatro del Espacio.


Presente en la ceremonia, Descombey afirmó, en alusión a Lo bailado nadie me lo quita: “Solange fue mi estrella por muchos años y, lo que es mejor, sigue siendo mi estrella”.


Eduardo Casar, quien leyó un texto preparado, resaltó el equilibrio que la autora logró al conciliar los contenidos autobiográfico y reflexivo, especialmente cuando asume posiciones críticas hacia los coreógrafos y reseña las exigencias y privaciones físicas que impone la “disciplina casi militar” de la danza.


El editor de la revista Deseo encomió particularmente la estrategia de Lebourges para alternar cargas emotivas y situaciones interesantes valiéndose de la división capitular del texto y el sostenimiento del ritmo narrativo del libro, siempre atractivo para el lector.


“Existe cierto consenso sobre la escasa verbalidad de los bailarines, acostumbrados a trabajar toda su vida con el cuerpo mudo, aunque tremendamente expresivo. El libro de Solange viene a desmoronar ese consenso, pues está muy bien escrito pese a que el español no es su lengua materna. “Se transita en él por una serie de situaciones que pone en evidencia el estado de la danza en nuestros días y, aunque se afinca en nuestro territorio, lo excede para abarcar lo que podríamos llamar de manera legítima la problemática del bailarín”, resaltó Casar.


El coreógrafo Marco Antonio Silva, quien compartió escenarios con Solange durante tres décadas, coincidió en el elogio de la buena escritura de la autora e insistió en agradecer a ésta el reflejar con puntualidad los esfuerzos físicos y técnicos que enfrenta un bailarín para lograr la excelencia dancística.


Lo bailado nadie me lo quita. Memorias de una bailarina fue escrito con una beca del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (FONCA) y está editado por la Dirección General de Publicaciones del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta).


Además de bailarina profesional retirada en 2004, Solange Lebourges es licenciada en letras modernas por la Universidad París X, Nanterre, traductora profesional y autora del libro En busca del dégagé perfecto, terminología del ballet, editado por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).


Ha recibido premios como el de la Unión de Cronistas y Críticos de Danza; la Medalla de Bellas Artes con ocasión de su retiro en 2004; el Danzante de la SOMEC en 2006 y el Caballero de la Orden de las Artes y las Letras que otorga el gobierno de Francia. (ATR)