El artista mexicano Bosco Sodi presentará su más reciente trabajo en Nueva York
Comunicado No. 2633/2011
28 de noviembre de 2011
***La exposición Ubi Sunt, integrada por 12 pinturas monocromáticas de gran formato que recrean cerezos en flor, estará en The Pace Gallery
***Conaculta se congratula porque la muestra, que se inaugura este 8 de diciembre, es la primera de un mexicano en esta galeria, creada en 1960 por el productor y director de cine Arne Glimcher

Materia orgánica como aserrín, fibras de yute, partes de árboles afroamericanos, trozos de ramas, tierra recopilada de diversas zonas de Nueva York y pigmentos orgánicos de color rosa mexicano, constituyen la materia prima de la exposición Ubi Sunt del pintor Bosco Sodi, que The Pace Gallery albergará del 9 de diciembre al 21 de enero.
En entrevista con Conaculta, Bosco Sodi comentó que Ubi Sunt hace referencia a una frase empleada por poetas medievales que quiere decir “¿Dónde estamos?” y que utiliza porque “habla sobre una meditación a la inmortalidad, a la comunicación y a la parte transitoria de la vida”.
La muestra es la primera exposición individual del artista mexicano en Nueva York y está integrada por una serie de 12 pinturas monocromáticas de gran formato, que trabajó en enero de este año en su estudio de aquella ciudad estadounidense, en las cuales predomina el color rosa mexicano para recrear una sala llena de cerezos en flor que provoque una especie de vibración.
“Entre mis proyectos estaba la idea de realizar una pieza grande que fuera de color rosa mexicano, ya que es un color que siempre me ha gustado porque es intenso y te hace vibrar, pero no la había podido hacer hasta ahora.
“Por este motivo, en la sala verán 10 piezas en forma de círculos, cuadrados y una serie de barras, en color rosa. A estas se añaden dos piezas; un circulo azul de 2.30 metros, que podría parecer un gran calendario azteca, que se ubica en la entrada de la exposición y al final hay otro cuadro negro de 2.30 x 4 metros, que coloqué para que quite la vibración que dejan las piezas rosas”, detalló Sodi.
Al cuestionarle sobre el proceso de creación de estas piezas, el pintor comentó que son de tipo escultórico, con acabado craquelado (producción de finas grietas que se forman a menudo en la superficie de las pinturas).
“Fue un trabajo casual que empecé a elaborar un día que llegue al estudio sin nada preconcebido y con ganas de hacer algo interesante. Mi manera de trabajar es muy orgánica y por eso el proceso fue muy sencillo: hice una especie de masa que fui poniendo poco a poco sobre el lienzo, que luego deje que se secara y sobre la cual volví a poner otra capa de masa. Al mismo tiempo, le fui poniendo diferentes pigmentos, aunque la masa ya estaba saturada de ellos.
“Fueron trabajos en fresco, es decir, los realicé cuando todavía estaba muy húmeda la materia, porque me gusta dejarla para que la intervenga la naturaleza en este proceso no controlado por mí, en donde se van craquelado y secándose solas”.
Por esta razón, explicó, no usó pinceles ni brochas cuando elaboró sus piezas, sino sus manos, que le permitieron estar en contacto directo con sus obras, embarrarse y jugar con ellas.
“Entre más te involucres físicamente con la obra, la obra agarra más energía. A mí me gusta mucho este proceso, que de cierto modo es de ser un niño y jugar con el lodo.
“Para mí, pintar o esculpir es uno de los grandes placeres de la vida, por eso me gusta pintarme las manos, ir poniendo o quitando con ellas el material que integra mis obras, todo esto como un proceso de energía, de movimiento, de intercambio físico con la obra”.
En la entrevista, el artista también reveló que estas piezas no están inspiradas en algo en particular y que espera que las personas que visiten su exposición, encuentren en ellas cosas simples que les llenen su vida.
“Para mí es muy importante que la gente vaya y vea mis piezas por un solo motivo: es una obra que habla de lo simple de la vida y que trata de obligarte a pensar y darle una lectura propia. Por eso, las personas que asistan sólo tienen que verla y vibrarla”.
Finalmente comentó que presentar su trabajo en Nueva York, en específico en The Pace Gallery, significa dar un gran paso en su carrera ya que expondrá en una de las galerías más importantes del mundo.
“Es estar en una de las mejores galerías a nivel mundial y compartir espacio con los grandes artistas vivos. Para mí es un gran honor, ya que es la primera exposición que hace un mexicano ahí y me da alegría porque significa que todavía hay un espacio para la pintura.
“Esto puede ayudar a todos los artistas jóvenes mexicanos que pintan o a los que les gusta la pintura, para que vean que también hay espacios para la gente que quiera hacer pintura abstracta, honesta y del alma”, concluye Bosco Sodi.