Recuerdan en el Museo de Arte Moderno el talento de Leonora Carrington
Comunicado No. 1190/2012
31 de mayo de 2012
***La obra de la artista plástica es única y difícil categorizar: Tere Arcq
La artista Leonora Carrington (1917-2011) siempre mostró su interés por los fenómenos sobrenaturales y los rituales mágicos lo que se manifiesta tanto en sus escritos como en sus pinturas, explicó la investigadora Tere Arcq en la Sala Gamboa del Museo de Arte Moderno.
Comentó que la magia y la alquimia le interesaban a la famosa artista al ser procesos relacionados con la pintura, el tarot, la astrología, como sistemas que le abrían la posibilidad de comprender los fenómenos del universo, la relación del microcosmos y el macrocosmos.
“La inclinación por diversas doctrinas ocultas, van a ocupar un lugar privilegiado en los temas que aborda Carrington en sus obras, a través de una intrigante serie de pinturas plasmó una interpretación personal de sus propias investigaciones acerca de la alquimia y la magia, donde la mujer es su principal protagonista”.
Para recordar a la emblemática artista a un año de su fallecimiento a través de su vida y trayectoria, la noche del 30 de mayo, Arcq ofreció la conferencia Leonora Carrington. In memoriam en la que planteó algunas de sus técnicas pictóricas y los intereses e influencias artísticas en la obra de una de las más notables creadoras que enriquecieron el panorama de las artes de México y el mundo.
Indicó que la obra de Carrington es única y difícil de categorizar en una corriente especifica, “aunque estuvo en muchos sentidos arraigada al surrealismo abrevó de distintas tradiciones pictóricas e ideológicas creando una extensa obra plástica en la que experimentó con una increíble variedad de medios y materiales como litografías, óleo, acuarela, dibujo, grabado, tapices, máscaras, escultura en madera policromada y bronce”.
La vida de la artista de origen inglés fue tan compleja y fascinante como su obra, quien a partir de su llegada a México en 1942, concibió un poderoso conjunto visionario de pinturas y escritos que representan mundos alternativos “donde las relaciones de espacio y tiempo se trastocan y la línea divisoria entre lo real y lo imaginario parece borrarse”.
Agregó que a partir de su llegada al país mexica, la representación de la mujer en la obra de “la última surrealista” se transforma donde sus mujeres no sólo son capaces de crear sino de transformar tanto la materia como la esencia humana.
“Leonora era declarada feminista, creció en una época en donde muchas mujeres no podían pintar, exponer sus cuadros en los museos, no podían trabajar y ella trataba de darle a las mujeres un lugar importante como lo tenían en la antigüedad”.
La también curadora comentó que a menudo se cuestiona la ausencia de motivos alusivos a México en las obras de Carrington con la excepción del mural El mundo mágico de los mayas que representa su visión muy particular del sincretismo religioso entre las creencias de los antiguos mayas y el catolicismo en la zona de Chiapas.
“Algunos críticos indican que la única relación que existe en su obra son sólo alusiones iconográficas como la incorporación de un comal, metate y mazorcas de maíz. No coincido con esa idea. Creo que México inspiró sus creaciones en muchos niveles, como la cosmología maya y la estructura narrativa de los códices.
“La influencia que México exigió en Carrington está ligado al contexto histórico y cultural del país, marcado por la conjunción de tradiciones ancestrales vinculadas al chamanismo con las traiciones espiritistas, ocultistas y herméticas que se entremezclan en el país desde el siglo XIX”, apuntó.
La especialista en arte surrealista dijo que Leonora Carrington, cuya obra se encuentra en mayor parte en México y Estados Unidos, rechazó cualquier dogma religioso y emprendió su propia búsqueda espiritual misma que se reflejan en sus creaciones pictóricas y literarias.
“A Carrington le estamos agradecidos por habernos traído todo este arte magnifico que nos maravilla cada vez que lo apreciamos”, finalizó.
Leonora Carrington, murió a los 94 años de edad el 25 de mayo de 2011. Dejó un trabajo literario relacionado con sus temas de creación plástica, donde se incluye cuentos, poemas, obras de teatro y novelas.