Palabras mgicas (para romper un encantamiento), documental sobre los asuntos pendientes de la Revolucin nicaragense 08/febrero/2013 00:00 Cine y artes audiovisuales Augusto César Sandino fue líder de la resistencia nicaragüense contra el ejército de ocupación estadounidense a principios del siglo XX. A su muerte, el gobierno del dictador Somoza decidió exhumar su cuerpo, cremarlo y esparcir sus cenizas. Surgieron entonces varias historias sobre su paradero, una de ellas lo ubica en el Lago Managua; el documental Palabras mágicas (para romper un encantamiento), se adentra en ese tema. Dirigido por Mercedes Moncada, nicaragüense pero avecindada en México desde hace 20 años, el documental será proyectado el 9 de febrero, a las 13:00 horas, en el Faro de Oriente, dentro de la programación de la Gira Ambulante. El filme fue producido con el estímulo de Foprocine, Producciones Amaranta, Casa Comal, Miss Paraguay Producciones y TVUNAM. En entrevista con Conaculta, la cineasta detalló que se trata de una propuesta fílmica que busca retomar el tema de lo que ocurrió con las cenizas, “pero sobre todo, al filmar en ese Lago Managua, descubrí que había una lectura mucho más profunda respecto a lo que significa la creencia de que sus cenizas están en ese lugar. “En un sentido literal y figurado, ahí cae toda la mierda de la sociedad nicaragüense, pues sirve como depósito de las aguas negras de la ciudad, además de que para la gente, la figura de Sandino, el máximo patriota de mi país, aún está presente a través de sus ideales. Para ellos la guerra no ha terminado, pues las partes enfrentadas nunca dieron ninguna explicación pública, simplemente terminaron la guerra y negociaron a sus espaldas”. Cabe recordar que Nicaragua, a principios del siglo XX, vivió una lucha guerrillera que logró sacar de su país a las tropas de Estados Unidos, quienes crearon la Guardia Nacional e impusieron en el poder a Anastasio Somoza García, quien a traición, mandó detener y asesinar a Sandino. En otro sentido, Moncada pertenece a una generación distinta a la que vio cómo su compatriota Sandino defendió los ideales de su país, y a ellos les tocó nacer y crecer con la guerra, por lo que la violencia es un elemento que aún prevalece en su sociedad, que ahora se manifiesta en forma de enfrentamiento entre pandillas de traficantes. Para ella, esa situación ha sido alimentada por el propio gobierno surgido del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN). Este alimenta esa situación para intentar paliar ese efecto “tan extraño para mi pueblo, de que la guerra no ha terminado… es muy duro, porque existen muchos asuntos que no han concluido, problemas y aspiraciones que todavía están en el imaginario de la gente, todo porque no hubo un explicación de cómo fue que acabó la guerra. “Ese es el corazón de mi documental, me refiero a que mi intención es la degenerar una reflexión sobre estos asuntos, desde luego sin juzgar ni ofrecer soluciones, aunque sí queda claro cuál es mi postura frente a ellos”.