Integra poesía y narrativa el título Interno de guardia, de Gustavo Padilla 17/septiembre/2013 00:00 Libros, revistas y literatura Con el libro Interno de Guardia Gustavo Padilla Barraza propone al lector una incursión al mundo de la medicina a través de la poesía y la narrativa. El autor aborda aspectos que resultan de alto impacto en la vida tanto personal como profesional de los trabajadores de la salud, concretamente en el internado, el servicio social, y en caso de este libro el trabajo profesional de un médico  en el sector público de salud. Con el libro Interno de Guardia Gustavo Padilla Barraza propone al lector una incursión al mundo de la medicina a través de la poesía y la narrativa. El autor aborda aspectos que resultan de alto impacto en la vida tanto personal como profesional de los trabajadores de la salud, concretamente en el internado, el servicio social, y en caso de este libro el trabajo profesional de un médico  en el sector público de salud. La obra es editada por el Instituto Chihuahuense de la Cultura dentro de su Programa Estatal de Publicaciones, con el apoyo de la Dirección  General de Vinculación Cultural del Conaculta.  El autor expone que el internado es una etapa de la carrera médica que inicia al concluir la parte académica, consta de un año entero dentro de un hospital, con guardias de hasta 36 horas seguidas y rotación por todos los servicios del hospital. Mientras que el servicio social inicia al concluir el internado y consiste en un año más prestando servicios de salud diversos a una comunidad específica, muchas veces aislada y alejada.  Por último, el Sistema Nacional de Salud otorga servicios diversos a la población mexicana, bajo diferentes esquemas y mecanismos, que incluyen al IMSS, al ISSSTE, a los Sistemas Estatales de Salud.El libro tiene como fondo estos tres escenarios y a lo largo de ellos se despliega la poesía escrita por un médico en esas etapas de su formación, y de manera intercalada una narración (20 años después) que es contada por un doctor que trabaja en el sistema de salud.“El libro busca dar una serie de matices que abarcan las principales emociones que vive el médico: situaciones a veces de grandeza y en otras ocasiones de enorme pequeñez, de triunfo y derrota, vida y muerte, tragedia y comedia, risa y llanto. Pretende ser un texto sincero que presente dichas emociones de un modo altamente humano, despejando al médico de cualquier etiqueta de heroísmo o pedestal mal entendido o villanía mal entendida también.“La poesía contenida en el libro realmente es la obra de un joven. En lo personal hice el servicio social durante el año 1996-97, y de esos años datan esos escritos. El texto narrativo es más reciente, pero igual tiene ya unos 10 años desde que lo completé. Siempre me he considerado afortunado por saber apreciar el placer de la lectura, considerándo ese hábito el mejor regalo recibido de mis padres. Comencé a escribir en el transcurso de la escuela preparatoria, y ya para mis años de estudiante de medicina las poesías garabateadas en los cuadernos donde debería haber apuntes de anatomía o fisiología, eran parte normal de mis hábitos y mi personalidadâ€. Gustavo Padilla Barraza comenta que la costumbre de escribir la mantuvo como un gusto casi secreto, y ver publicado un libro fue un simple y agradable sueño. “Todos mis textos los fui acumulando en una maleta, y ahí se hubieran quedado para siempre, de no ser por una convocatoria que pude ver, pegada en la puerta de una biblioteca, por el Instituto Chihuahuense de la Cultura dentro de su Programa Estatal de Publicaciones. Seguí los pasos necesarios, para mi asombro y sorpresa pude darme cuenta, tiempo después, que había sido uno de los adjudicados.“La experiencia personal de ver publicado un libro de mi autoría, me tiene en un punto con más interrogantes. La expectativa consiste en un ánimo renovado en el hecho de que, con la preparación suficiente, puedo llegar a ver realizado mi más grande proyecto: llegar a ser un buen escritor. En este sentido, el Programa de Publicaciones deI Ichicult fue para mí una verdadera bocanada de oxígeno y de ánimo. Con respecto a las interrogantes, un escritor novel como yo, con un libro bajo su brazo, se ve de pronto bajo las siguientes interrogantes ¿y ahora qué hago? ¿cómo lo distribuyo? ¿cómo lo doy a conocer?  Pienso que hace falta mayor asesoría a este respecto.“El libro volcó de lleno mis afanes hacia la literatura. Tengo ya completado un nuevo libro de poesía titulado La vida no se escribe  y una novela Los clavos ocultos. Mi proyecto personal es darle cada vez más lugar a esto que alguna vez fue un simple hobby y actualmente una verdadera pasión, y darme a conocer, poco a poco, como escritorâ€.