Otorgan el nombre de Guillermo Tovar de Teresa a librería del FCE en el Museo de la Ciudad de México 07/agosto/2014 00:00 Patrimonio cultural, arquitectura y turismo Libros, revistas y literatura Es el primer intelectual nacido en los años 50 del siglo XX que recibe tal distinción: Rafael Tovar Guillermo Tovar de Teresa, cronista de la Ciudad de México fallecido en noviembre de 2013, se convirtió en el primer intelectual de la generación de los años 50 del siglo XX que da nombre a una librería del Fondo de Cultura Económica. El recinto fue inaugurado en el Palacio de los Condes de Santiago de Calimaya, actual Museo de la Ciudad de México.  Creo que Guillermo no podría haber estado más satisfecho y orgulloso de que su nombre permanezca en este Palacio de Santiago de Calimaya, una de las joyas coloniales que, me consta, era uno de sus edificios preferidos, dentro del lugar preferido de su vida, que fue la Ciudad de México, expresó el presidente del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, Rafael Tovar y de Teresa, durante un homenaje organizado para el desaparecido Cronista Emérito de la Ciudad de México, por la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México y el Fondo de Cultura Económica (FCE). Al participar en la mesa de reflexión sobre el erudito que a los 13 años fue consejero de arte colonial de la Presidencia de la República, Tovar y de Teresa agradeció que el gobierno capitalino y el FCE hayan decidido abrir en el Antiguo Palacio de los Condes de Santiago de Calimaya, actual Museo de la Ciudad de México, una librería con el nombre de su hermano, Guillermo Tovar de Teresa, fallecido prematuramente el 10 de noviembre de 2013. Durante su participación, el titular de Conaculta  señaló que su familia depositó en la Biblioteca Nacional de Antropología e Historia, a petición de Guillermo Tovar, un libro de cinco siglos de antigüedad que fue guía para el trazo urbano de la Ciudad de México: el Tratado de Arquitectura de León Battista Alberti, con anotaciones del Virrey Antonio de Mendoza, lo cual, dijo, da cuenta de su generosidad. Se trata de uno de los libros más atesorados por él, precisó Tovar y de Teresa, impreso en 1512 y traído a México como guía urbanística para la Nueva España en 1532. "A nombre de Guillermo lo hemos depositado en la Biblioteca Nacional de Antropología e Historia. Es un ejemplar realmente extraordinario, que habla de la generosidad de Guillermo pues se trata de un ejemplar único en el mundo que, junto con otros miles de documentos únicos que tuvo, perpetuarán el interés por el conocimiento de nuestra ciudad y de nuestro país". Y en ese sentido, resaltó que el autor de La ciudad de los palacios. Crónica de un patrimonio perdido es el primer intelectual nacido en los años 50 del siglo XX que es distinguido al otorgarle su nombre a una de las 24 librerías que el FCE tiene en el país.  En la mesa de reflexión estuvieron presentes intelectuales que conocieron y trabajaron con el historiador y defensor del patrimonio cultural de México: el poeta Homero Aridjis, los investigadores de historia Luis Ignacio Sáinz y Cristina Gómez Álvarez; así como el secretario de Cultura de la Ciudad de México, Eduardo Vázquez Martín; el director del Fondo de Cultura Económica, José Carreño Carlón, y el director del Museo de la Ciudad de México, José María Espinasa. Entre quienes escuchaban se distinguían la familia del historiador, incluyendo a su hermano Fernando, además de editores, historiadores, escritores y músicos como Adolfo Castañón, Ignacio Solares, Javier Garcíadiego, Guadalupe Loaeza y Carlos Prieto. "Nuestra urbe, que tanto le debe a Guillermo Tovar, desea hoy, con la apertura de la librería que lleva su nombre, empezar a pagar parte de esa deuda –dijo el secretario de Cultura capitalino, Eduardo Vázquez Martín—. Cuando fue nombrado cronista de la Ciudad percibió que no era la misma urbe que habían retratado ilustres ancestros suyos, desde Francisco Cervantes de Salazar hasta Salvador Novo, y que ésta megalópolis necesitaba de una labor colectiva, más democrática, por lo que creó el Consejo de la Crónica al que invitó a personalidades como Octavio Paz, Carlos Monsiváis o Miguel León Portilla, por mencionar sólo a algunos". La habilidad para dialogar y polemizar hicieron que Guillermo Tovar llegara a decir que "lo que la política separa, la cultura lo une y el amor por la ciudad lo entrelaza". Esta frase fue retomada por el director del FCE, José Carreño, para reflexionar en voz alta y decir que la nueva librería que lleva el nombre del cronista emérito es un ejemplo de que la política no siempre separa. "La diversidad política y cultural de la Ciudad de México también nos unen y nos enriquecen. Hoy la pluralidad política de nuestro país está llegando a un apreciable madurez, sin menoscabo de sus filiaciones políticas", dijo el titular de la editorial más grande de México. En la intervención final, antes de que se cortara el listón inaugural de la librería que pondrá a la venta 20 mil libros desde este 7 de agosto, el poeta Homero Aridjis  recordó que Guillermo Tovar y de Teresa era nombrado "El niño Tovar" por Fernando Benítez, pionero del periodismo cultural de México. Después lanzón una iniciativa que provocó un segundo de silencio y luego aplausos. "Propongo que su biblioteca personal se convierta en un centro de estudios. Ese acervo debe salvarse y ser un punto de referencia y estudio para el público, pues Guillermo fue uno de los grandes defensores de la ciudad", dijo el poeta y ecologista, fundador del Grupo de los Cien.