El cuerpo suspendido que se desdobla y emerge, parte de la coreografía Flota 29/mayo/2015 00:00 Artes escénicas Centro Cultural del Bosque Las posibilidades de percepción del espacio-tiempo son infinitas, así lo revela la coreografía Flota que se presentó la noche de este jueves 28 de mayo en el Teatro de la Danza del Centro Cultural del Bosque. La bailarina Bárbara Foulkes explora la gravedad y la colocación del cuerpo en otros espacios que no son habituales con ayuda de un arnés para caminar sobre una pared o desplazarse de cabeza sobre ella, mientras algunas pantallas proyectan sus movimientos. La pieza también se apoya en el uso de cámaras de circuito cerrado y sonidos pregrabados y recompuestos de la Ciudad de México hechos por Ricardo Cortés, que dialogan constantemente con lo que ocurre con la intérprete. Compuesta a manera de un tríptico, Flota permite ver a Bárbara Foulkes en diferentes estados físico-mentales y formas de estar en escena bajo las condiciones de una gravedad alterada. La estructura coreográfica es clara y precisa. Se observan vueltas, giros, patadas y saltos que muestran una gran fuerza física y se transforman en desplazamientos etéreos y a veces suaves. Las posibilidades de percepción del espacio-tiempo son infinitas, así lo revela la coreografía Flota que se presentó la noche de este jueves 28 de mayo en el Teatro de la Danza del Centro Cultural del Bosque. La bailarina Bárbara Foulkes explora la gravedad y la colocación del cuerpo en otros espacios que no son habituales con ayuda de un arnés para caminar sobre una pared o desplazarse de cabeza sobre ella, mientras algunas pantallas proyectan sus movimientos. La pieza también se apoya en el uso de cámaras de circuito cerrado y sonidos pregrabados y recompuestos de la Ciudad de México hechos por Ricardo Cortés, que dialogan constantemente con lo que ocurre con la intérprete. Compuesta a manera de un tríptico, Flota permite ver a Bárbara Foulkes en diferentes estados físico-mentales y formas de estar en escena bajo las condiciones de una gravedad alterada. La estructura coreográfica es clara y precisa. Se observan vueltas, giros, patadas y saltos que muestran una gran fuerza física y se transforman en desplazamientos etéreos y a veces suaves. Se trata de un cuerpo suspendido que se desdobla y vuelve a surgir, transformando su significado y sentido al estar en un espacio y atmósfera diferentes. Por ello la sensación de vértigo, el peligro de caer y la lucha por mantenerse en pie son elementos constantes a lo largo de la representación junto con la apreciación de distintos ángulos, perspectivas y detalles del cuerpo de la bailarina. La también productora y docente argentina, quien reside en México desde 2009, colabora en proyectos colectivos e independientes. Ha sido beneficiaria de las becas del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (Fonca) de México; del Experimental Media and Performing Arts Center, de Estados Unidos, y de Movimiento Sur, de Chile. Durante 2013 y con apoyo de Eprodanza del Conaculta desarrolló el proyecto Pulpo // Propagación de ondas coreográficas. Actualmente trabaja con la Compañía Suspensa de Belo Horizonte, Brasil, en el proceso de construcción de una obra que se desarrolla en Brasil y en México gracias al apoyo de la Producción Iberescena 2015. La coreografía Flota se presentará nuevamente este viernes 29 de mayo a las 20:00, el sábado 30 a las 19:00 y el domingo 31 de mayo a las 18:00 horas, en el Teatro de la Danza del Centro Cultural del Bosque, ubicado a espaldas del Auditorio Nacional. Localidades: $80. 50 por ciento de descuento a maestros, estudiantes e INAPAM.