Las posibilidades sonoras que pueden emerger de las percusiones; los innovadores métodos de estudio apoyados por herramientas digitales, y sobre todo el compromiso artístico que deben asumir como instrumentistas de percusión; fueron algunos de los puntos que abordó Miguel Bernart, director del Drumming Grupo de Percussão, y miembro fundador de Ictus Ensamble de Bruselas, durante la clase magistral que impartió esta semana a los percusionistas de la Orquesta Escuela Carlos Chávez.

“Debemos de crear argumentos o herramientas sonoras que provoquen la evolución de nuestro instrumento, para que nos volteen a ver”, expresó Bernart, mientras mostraba sus baquetas para tocar la marimba llamadas marimbridas hechas con madera de maple duro y acabado en cera natural de abeja; así como el funcionamiento de la plataforma digital: Living Scores apoyada por la Fundación BBVA Bancomer.

Nacido en Valencia, España, Bernart es reconocido en el universo musical −sobre todo en Europa− por su contribución en la promoción y divulgación de obras contemporáneas y de la percusión como medio artístico.

En este sentido, mostró a los noveles percusionistas de la OECCh, en cómo el uso de estas baquetas, permiten un nuevo enfoque musical y la emisión de nuevos timbres y sonoridades cuando tocan la marimba, la cual suena muy diferente dependiendo del ángulo de ataque, y misma que son necesarias cuando se ejecutan obras contemporáneas como Noche (2007), de Mauricio Sotelo; Colores primarios (2006), de Charles Augusti; Marímbrida (2009), de Polo Vallejo; y Through Lines (2009) de Dimitri Andrikopoulos.

Debemos buscar ser protagonistas y no esperar a que los compositores creen nuevas obras, es nuestro deber proponerles sonidos y seducirlos con otras posibilidades, la creación de las baquetas Marímbridas, son ejemplo de ello, señaló enfático, para después dar muestra del sonido que emerge de la marimba, cuando se utilizan dichas baquetas.

Se trató de la cátedra en la que Bernart dio muestra de su depurada técnica musical e interpretativa, y en la que en todo momento motivo a los jóvenes de la sección de percusiones de la OECCh o moverse, a siempre buscar nuevos caminos si su deseo es explorar toda la expresividad musical de su instrumento.

Dijo que la percusión es diversión por su parentesco con la danza, todo el movimiento es diversión y vida para el cuerpo y el alma, uno al moverse, al andar, al hacer, se siente vivo y ése es el primer beneficio.

“Como percusionistas tenemos la responsabilidad que ésta evolucione, debemos enriquecerlo con nuevas propuestas y así convencer con argumentos a las gobiernos y fundaciones que apoyan la música, para que el público busque más conciertos de percusión”.

En este sentido, el también director del Drumming Grupo de Percussão, y miembro fundador de Ictus Ensamble de Bruselas, compartió su experiencia en el proyecto Living Scores, apoyado por la Fundación BBVA Bancomer, en el que se unió con otros compañeros de Ictus Ensamble para configurar esta plataforma y convencer a los directivos de este banco a financiarla para el desarrollo de la especialidad y sus ejecutantes en el mundo.

En el año en el que yo participé, competimos con más de 6 mil proyectos y sólo 20 fuimos financiados, informó. Living Scores es un concepto que tiene como objetivo presentar nueva música a nuevos públicos y aumentar el impacto del repertorio contemporáneo. La propuesta está basada en la experiencia como intérprete y en la investigación artística; y define temas innovadores para abordar las preocupaciones actuales sobre el rendimiento de la música contemporánea. 

Esta plataforma digital, explicó, permite a los músicos acercarse a nuevos repertorios, a nuevas maneras de abordarlo. Es el producto de aproximadamente 12 años de investigación y trabajo conjunto con los compositores de las obras que se pueden encontrar, además de un año de desarrollo digital, realizado por algunos miembros del Ictus Ensamble de Bruselas, percusionistas que buscamos crear nuevas formas. Porque reiteró “Necesitamos crear argumentos, que cada uno de nosotros haga algo a favor de la evolución de nuestra especialidad”, concluyó.

Miguel Bernat tiene una trayectoria como docente en el Conservatorio de Rotterdam y Bruselas, además de una importante labor pedagógica en la Escuela Superior de Música de Oporto y la Universidad de Aveiro, en Portugal, así como la Escuela Superior de Música de Cataluña, en España.

Información: CBMR

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