“Ecos del Manglar”, tradición y modernidad en un espectáculo multimedia
15 de diciembre de 2020
Con un conjunto de cinco piezas en las que conjugan tradición con las nuevas herramientas tecnológicas audiovisuales, la agrupación escuinapense Los Manglares del Ciervo, presentaron el espectáculo multimedia "Ecos del Manglar", un alegato a favor de las tradiciones indígenas sinaloenses, de sus centros ceremoniales y de la conservación del hábitat en Sinaloa.
* La agrupación Los Manglares del Ciervo, originaria de Escuinapa, usó elementos tradicionales y las nuevas tecnologías audiovisuales
Con un conjunto de cinco piezas en las que conjugan tradición con las nuevas herramientas tecnológicas audiovisuales, la agrupación escuinapense Los Manglares del Ciervo, presentaron el espectáculo multimedia "Ecos del Manglar", un alegato a favor de las tradiciones indígenas sinaloenses, de sus centros ceremoniales y de la conservación del hábitat en Sinaloa.
La producción fue presentada dentro de la Temporada Cultural de Otoño 2020 del Instituto Sinaloense de Cultura, a través de la página del ISIC en Facebook y de su canal en YouTube, en una actividad llevada a cabo gracias al respaldo financiero de la Secretaría de Cultura a través del programa Apoyo a Instituciones Estatales de Cultura (AIEC) 2020.
Participaron Jesús Aguilar Vargas (“Ter”), artista audiovisual; Ulises Muñoz Osuna (“Syd Balam”), en los sonidos prehispánicos experimentales; Enrique Ezequiel López Balmaceda, poeta y técnico en audio; Jesús Antonio Carrillo Castañeda, asistente técnico, fotografía y video; Jorge Rivera Aguilar, bailarín, y Sammy Muñoz Osuna, asistente técnico.
Ellos crearon una propuesta escénica audiovisual que incluye videos de hábitat con proyección videomaping y música ancestral combinada con sintetizadores, con relatos y poesía escrita por Enrique Ezequiel y por “Syd Balam”, artista sonoro que a partir de grabaciones en reservas voluntarias a la protección y estudios de campo natural conjuga con sonidos de ocarinas y réplicas de instrumentos prehispánicos, creando atmosferas naturales y sintéticas.
El programa abrió con la pieza “Los Manglares del Ciervo” en la que se conjugan imágenes de manglar, de venados, de jaguares y de danzantes de venado del norte de Sinaloa.
Siguió con “El niño perdido en Culiacán” que retoma la canción tradicional cantada por El David Aguilar, quien le puso letra, entre imágenes de niños que no dejan de serlo en la playa, en la ribera de los ríos, en la pobreza, en sus juegos, y en su inocencia.
“Mangle Calón”, que recrea el manglar de Agua Grande, Escuinapa, y el centro ceremonial de los totorames, en el que destaca su pirámide de conchas de moluscos, única en el país.
“7 Venado viejo”, metáfora audiovisual de un venado en decadencia, en la flora y fauna se asoman entre arrebatos visuales tecnológicos y múltiples sonidos prehispánicos o de selva.
Cerró con la que da nombre al espectáculo, “Ecos del Manglar”, un homenaje a los pueblos originarios del norte de Sinaloa, en lucha por preservar su ecología y, en particular, contra la planta de fertilizantes en construcción, en un manglar, retomando incluso videos de actos públicos de protesta.