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Recuerdan la Batalla de Churubusco, un ejemplo de valentía en la defensa de México

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Información: MAC
Comunicado No. 1288/2010
23 de agosto de 2010

***Este viernes se llevó a cabo una ceremonia cívica para conmemorar el 163 aniversario de la defensa contra las fuerzas norteamericanas

***Autoridades depositaron una ofrenda en el monumento del general Anaya, en el monumento de los héroes caídos e inauguraron la exposición Dos visiones de la guerra México-EU, 1846-1848. Litografías de Carl Nebel

Si bien la Batalla de Churubusco del 20 de agosto de 1847, como parte de la Guerra de Intervención Estadounidense (1846-1848), se recuerda como una derrota para el país, también es ejemplo de valentía y heroísmo en la defensa de México. Por ello, al cumplirse 163 años de aquella batalla, este viernes se llevó a cabo una ceremonia cívica en la que diversas autoridades depositaron una ofrenda en el monumento del general Pedro María Anaya, así como en el de los héroes caídos e inauguraron la exposición Dos visiones de la guerra México-EU, 1846-1848. Litografías de Carl Nebel.

      La ceremonia cívica se realizó en la entrada del ex Convento Santa María de Churubusco, hoy sede del Museo Nacional de las Intervenciones (MNI), donde participaron el director general del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Alfonso de Maria y Campos; Raúl Flores, jefe delegacional de Coyoacán; Enriqueta Cabrera, directora del MNI; así como el grupo musical Zarahuato y diversos actores que representaron al general Anaya y al ex presidente Antonio López de Santa Anna.

      Enriqueta Cabrera consideró que esta conmemoración cobra una relevancia especial en el año en el que celebramos el Bicentenario del inicio de la Independencia de México, pues la Batalla de Churubusco se ubica muy claramente dentro de la trayectoria que fue la defensa de la soberanía y la reafirmación de la Independencia.

      “El combate a la intervención norteamericana de 1846-1848 y a la francesa que pretendió instaurar en México el Imperio de Maximiliano entre 1862 y 1867, son sólo dos ejemplos. Hoy conmemoramos la de Churubusco y hay que señalar que en 1867 es la auténtica consolidación de la Independencia, de manera que el largo trayecto del siglo XIX se ubica muy claramente dentro del Bicentenario de la Independencia”, dijo la directora del MNI.

      La Batalla de Churubusco tuvo lugar en 1847, cuando tras la derrota en Padierna, Santa Anna ordenó el repliegue del ejército mexicano hacia la ciudad de México, instruyendo a los generales Manuel Rincón y Pedro María Anaya, a que defendieran a toda costa el Convento de Churubusco.

      En la mañana del 20 de agosto de ese mismo año, alrededor de 6 mil efectivos de las fuerzas norteamericanas emprendieron el ataque al puente de la calzada de Tlalpan y al Convento de Churubusco. En este último, los soldados mexicanos habían erigido un parapeto y un foso con agua para obstaculizar el avance enemigo.

      Sin embargo, los norteamericanos iniciaron el asedio al convento, siendo una y otra vez rechazados por los batallones mexicanos Independencia, Bravos, Guerrero, Chilpancingo y Tlapa, y por el de San Patricio, conformado por irlandeses que habían desertado del ejército norteamericano para luchar por México al darse cuenta de lo injusta de la invasión y sentirse identificados por la agresión que habían sufrido años antes los irlandeses por parte de los ingleses.

      Al agotarse las municiones, las fuerzas mexicanas, que no sobrepasaban los mil 300 efectivos, continuaron embistiendo al enemigo a bayoneta y culatazos. Así murieron el coronel Francisco Peñuñuri y Luis Martínez Castro. Finalmente, ante la imposibilidad de seguir resistiendo, el general Anaya rindió la posición frente al general norteamericano Twiggs.

      El director general del INAH, Alfonso de Maria y Campos, señaló que hay una enseñanza de aquella derrota. “Debemos saber que lo que genera la desunión, el no trabajar por metas comunes, más allá de la diversidad que tiene México, lingüística, étnica, religiosa, intelectual, ideológica, la unión tiene que tener el mensaje de este momento histórico y de este Bicentenario que está ligado a la libertad, a la igualdad, a la lucha, la soberanía, pero sobre todo con la unión que todos los mexicanos debemos de tener para enfrentar el momento presente y legar a nuestras futuras generaciones un pueblo más fuerte, unido, próspero y feliz”.

      El investigador José Luis Juárez se refirió a las litografías que integran la exposición Dos visiones de la guerra México-EU, 1846-1848. Litografías de Carl Nebel, y contextualizó que en aquella época, siglo XIX, acercarse a la guerra de una manera artística fue una característica, sobre todo por parte de los extranjeros.

      “Cuando se comenzaron a hacer imágenes que tenían que ver con la guerra, éstas fueron obras de autores extranjeros y dentro de ese grupo sobresale el álbum The War Between The United States and Mexico, Illustrated, editado en 1851. Este álbum conjugó dos tendencias modernas: el incipiente periodismo y el trabajo litográfico.

      “Tiene como principal característica presentar en 12 litografías que van siguiendo la invasión de la que fue objeto México en 1846-1848. Se llamó al artista alemán a Carl Nebel, quien realizó imágenes con una tendencia a exaltar al héroe norteamericano, es decir que estamos ante un trabajo artístico muy estético pero definitivamente hecho desde el punto de vista de los triunfadores, no de los mexicanos.

      “Sin embargo, en estas litografías quedaron atrapados paisajes majestuosos de México y construcciones coloniales que a la vez que fueron fortalezas para los mexicanos, así como la belleza de flora y fauna del país. Podemos acercarnos a estas litografías dejando a un lado la injusticia de la invasión y la derrota que dejó, pero centrarnos en la belleza de este trabajo que si bien no refleja lo que quisiéramos, sí son parte de la historia. Además, las litografías exhibidas en la barda perimetral del Museo Nacional de las Intervenciones están acompañadas con textos de la época de autores mexicanos, por eso se les ha llamado Dos visiones de la guerra México-EU, 1846-1848. Litografías de Carl Nebel".