Sexo por compasión, dirigida por Laura Mañá, 1999. Fotografía: Archivo IMCINE





Cortometraje ¿Qué hora es?, dirigido
por Pilar Pellicer, 1995. Fotografía: Archivo IMCINE

El Fondo se integrará con una aportación inicial del gobierno federal y con las que, progresivamente, vayan realizando los sectores público, privado y social, por las donaciones de personas físicas o morales, por los rendimientos que se generen a través de inversiones, por el producto de derechos y por las sanciones pecuniarias administrativas que se apliquen con motivo de la Ley.

Los recursos del Fondo se destinarán preferentemente al otorgamiento de capital de riesgo, capital de trabajo, crédito o estímulos económicos a las actividades de realización, producción, distribución, comercialización y exhibición de cine nacional.

Fomento a la Producción Cinematográfica: largometrajes

El apoyo que otorgó el Instituto a la producción de largometrajes de carácter documental, experimental y operas primas, no sólo alentó la producción de películas de calidad, también propició el surgimiento de nuevos cineastas. De 1995 al 2000 el imcine, a través de su Programa de Apoyo a la Producción Cinematográfica, brindó recursos para la realización de 26 películas.

Con ello, el cine mexicano logró consolidar nuevos públicos, sobre todo a partir de la gran aceptación de películas como El callejón de los milagros, Cilantro y perejil, Bajo California: el límite del tiempo y Sexo, pu-

dor y lágrimas, que fue vista por alrededor de 5 millones de personas.
Por otra parte, se establecieron diversos acuerdos con las empresas que cuentan con amplios canales de distribución y exhibición, con el fin de garantizar a la producción nacional mejores condiciones para su difusión y competitividad.

En el mismo lapso, se realizó la producción de las series de televisión El Batallón de San Patricio y Los que hacen nuestro cine, esta última con el propósito de destacar la labor de los protagonistas del cine mexicano y sus aportaciones a la filmografía nacional.

Cortometrajes

La labor del imcine en los últimos años también estuvo orientada a estimular la producción de cortometrajes de carácter documental, experimental y ficción, que entre 1995 y el 2000 fue de 57.

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