En 1996 Profundo carmesí de Arturo Ripstein asistió al Festival de Venecia (en el cual una película mexicana no competía desde 1965) y ganó tres premios "Osella de Oro": a la Mejor Película, al Mejor Guión y a la Mejor Ambientación. Pasajera, largometraje de Jorge Villalobos, fue reconocido, en 1997, tanto en el Festival Internacional de Biarritz, Francia, como en el Iberoamerican Film Festival, de Huelva, España.

Asimismo, desde 1974 no participaba una película mexicana en competencia en el Festival de Cine de Cannes, Francia, y en 1999 lo hizo El coronel no tiene quien le escriba, también de Ripstein, la cual fue reconocida por la crítica especializada, además de concretar su venta a otros países.

Por otra parte, en lo referente a cortometrajes, fueron varios los que participaron en los festivales más importantes del mundo, obteniendo en total 85 premios. Sin sostén de Antonio Urrutia y René Castillo y En el espejo del cielo de Carlos Salces fueron los más galardonados, al recibir 6 y 20 premios, respectivamente.

La asistencia a festivales y mercados internacionales también buscó ampliar la cartera de clientes que compran con regularidad material mexicano, así como dio a conocer los nuevos filmes apoyados por el Instituto.

Participación en eventos nacionales

Con el propósito de promover y difundir el cine mexicano en todo el país y acercar la cultura cinematográfica a los diversos núcleos de población, el imcine participó en varias actividades en coordinación con instancias culturales como patronatos, institutos de cultura estatales y universidades públicas y privadas.


Cortometraje Ciudad que se escapa, dirigido por Rodrigo García Saiz, 1999. Fotografía: Archivo IMCINE

atrás