Especial atención recibieron los municipios y localidades menos provistos de bienes y servicios culturales, en donde se promovieron estrategias específicas que les permitieron acceder a dichos beneficios dentro de un esquema de fortalecimiento de la infraestructura y culturas locales.

Asimismo, se estrechó la convivencia entre las culturas urbanas muchas de las cuales se nutren de la confluencia de elementos regionales y étnicos y rurales. Se consideraron las particularidades de ciudades como las fronterizas, que demandaron el desarrollo de mecanismos acordes con su realidad.

La dgcp, por otra parte, impulsó el papel de las Unidades de Culturas Populares en los estados de la República al igual que la coordinación con las diversas dependencias del conaculta y del Sistema Educativo Nacional, con instituciones públicas y privadas, institutos de cultura, centros de investigación y universidades, entre otros organismos dedicados a este quehacer.

Programa de Apoyo a las Culturas

Municipales y Comunitarias (pacmyc)

Con doce años de labor ininterrumpida, durante este periodo el pacmyc reorientó y fortaleció sus objetivos de estímulo a la creatividad de los grupos populares y de aliento a la generación de espacios de expresión, mediante el apoyo a las culturas populares e indígenas, con recursos financieros y herramientas técnicas.

El programa consolidó su propósito mediante la descentralización de los Fondos Estatales pacmyc en 30 estados de la República, lo que permitió incrementar la demanda y calidad de los proyectos, y la ampliación de recursos financieros gracias a la suma de aportaciones de los distintos niveles degobierno. A ello contribuyó también la constitución de las Comisiones de Planeación y Apoyo a la Creación Popular (cacrep) en cada entidad.

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