Presentará Raúl Parrao Inter-Z-on-E=Universo-E/x en el Palacio de Bellas Artes
Aprovechando que el año pasado se cumplían 100 años del natalicio de William S. Burroughs, Raúl Parrao, director artístico del Centro de Producción de Danza Contemporánea, asumió el reto de abordar la estética literaria de este autor dentro de su quehacer como coreógrafo y con su lenguaje que es la danza.
Raúl Parrao, refirió que trató de retratar el mundo sórdido de la obra de Burroughs, quien perteneció a la generación beat, un sujeto fragmentado, en conflicto consigo mismo y que cargó con la culpa de haber matado a su esposa al fallar un disparo.
El coreógrafo analiza la relación curiosa que tuvo con su esposa, con quien decide llevar a cabo un juego en el que coquetean con la muerte, al colocar sobre la cabeza de ella algún objeto para que él tirara, y él siendo un buen tirador un día por casualidad falla, quitándole la vida.
Toma la relación entre ellos y trata de imaginar su pensamiento para abordar lo que siempre le ha preocupado en su obra desde hace tiempo: la condición humana.
"Lo que siempre expongo son estas fragilidades del ser humano, y a través de esta conformación del personaje que simula ser un Burroughs, presento un sujeto fragmentado que, por un lado, es muy racional y, por otro lado, tiene dificultad para entablar una relación emotiva, desde su esposa, sus amigos íntimos y su hijo".
El director artístico se inspiró en la experimentación de Burroughs, quien hizo de su vida una obra, a través del cut up o quita y pega, que consistía en tomar textos de un periódico, revista o fragmentos de algunos pasajes de William Shakespeare.
De ahí el título de la obra Inter-Z-on-E=Universo-E/x, "si bien no entendemos lo que dice, la imagen y fonética provoca una sensación, pues la danza va dirigida más hacia la psique que hacia la razón", manifestó el coreógrafo.
Parrao toma el riesgo de abordarlo y crear una obra para que se perciba, para observarla y estar abierto, para dejarse invadir por imágenes que provocan sensaciones, al igual que la experimentación de corte y pega realizada por el escritor.
Otro aspecto que ha llamado la atención del coreógrafo es el mundo delirante de Burroughs: un mundo oscuro, denso; su temática sobre la sexualidad, sobre las drogas, la saturación de imágenes, lo ha entusiasmado.
Su obra se ve impregnada de la experiencia en diferentes técnicas y estilos de danza contemporánea que ha estudiado y practicado, incluyendo la danza butoh; así como de su propia cultura, a la cual describe como una cultura de mixturas, donde se refleja su folclor.
El autor consideró que su obra, que es un tanto abigarrada, en cuanto a trabajo corporal, a fraseo de movimiento, a trabajo interpretativo, estructuras musicales, estructuras coreográficas, escenografía, video, es un sello de lo que él llamo danza bizarra.